Ejem, mmm, eh... ¿mande?

Y me hago la occisa... ¿Porqué? Simplemente no quiero verme como chamaca de primaria, aunque es lo lindo del asunto...

Recién platicaba con Lores y le decía que porqué las cosas no podían ser como antes... Los tiempos eran otros.
Recuerdo que lo que yo hacía era, como siempre, a lo bruto, decirle al niño: "Me gustas". ¡Uffa!

Lo que hacía el nene era enseñarme la lengua (en el mejor de los casos) y decirme "tú a mi no" y echaba a correr. Volteaba y seguía mis juegos infantiles con mis amigas. No pasaba nada. No lloraba por un inminente batazo ni porque me rompieran el corazón. Ahora es que extraño esos tiempos pero creo que me he encargado de revivirlos últimamente, aunque con la responsabilidad que implica el ya ser adulto (¡uy!)

Antier me recordé en mi niñez... hasta igual de inocente... "Me gustas y por eso quiero conocerte"... ¿Qué tal? La respuesta fue afirmativa, mis queridos... Ahora no salieron corriendo ni me enseñaron la lengua... No me dijeron: "tú a mí no". Sólo leí un "tú también me gustas" que ya merecía...

No les voy a contar de quién hablo, ese es un asunto privaito que me quedo yo... Sólo les contaré que alguien se ha dado cuenta de mi valor y de lo que tengo para ofrecer... Sólo les contaré que alguien aceptó el reto que represento y que lo que venga, de ahora en adelante, ya es ganancia...

Vamos por todas las canicas, eso sí... "El riesgo vale la pena", eso me lo dijo un lindo gatito, hace ya un par de meses...